Picantes y picanterias
A mediados del siglo XX, establecidas tanto en la ciudad como en los alrededores, las picanterías mantenían el sello originario. “Son verdaderos restaurantes populares en los que la bebida es la clásica chicha de Arequipa. El almuerzo y la merienda con un vaso de chicha comporta 20 centavos cada uno”, reseña Alberto de Rivera.